¿Cuántas veces hemos visto separarse dos personas que se aman? Una sonrisa, una fotografía, cualquier cosa que pasa de mano en mano con tal de eternizar la despedida y alimentar el recuerdo. La mayoría de las despedidas son temporales, otras, las más dolorosas, son definitivas. Algunas están programadas, otras, las más duras, son imprevistas. Una de estas despedidas dolorosas e imprevistas fue la que sufrieron cientos de personas, cuando, en la madrugada del 6 de abril, perdieron la vida casi trescientas de ellas durante el terremoto que asoló la zona del Abruzzo italiano. Fue un acontecimiento que nos ofrece muchas oportunidades para reflexionar en temas centrales de nuestra breve vida. Basta con preguntarnos: ¿qué hubieran hecho esas personas si les […]