Una mujer es como una bolsa de té, no sabes lo fuerte que es hasta que la metes en agua hirviendo. Eleanor Roosevelt. Haberlas, haylas Últimamente, y desgraciadamente, veo como muchas mujeres abandonan a sus maridos e hijos, por una mal entendida necesidad emocional que no ha sido cubierta durante los años de matrimonio. Es verdad que después de muchos años de matrimonio, y si no se han cuidado los pequeños detalles de cariño, gratitud y respeto día a día, se abren unas heridas que son difíciles de curar. Muchas de ellas se quejan de la falta de atención y reconocimiento, de frialdad en la comunicación, de ausencia de intereses comunes, de un aumento de críticas y quejas cruzadas, de […]