Se oyó la voz del Padre: «Éste es mi Hijo, el amado; escuchadlo». El domingo pasado se nos dio la orden de salida: iniciábamos la CUARESMA. Y nos poníamos en camino a la PASCUA. Y se nos proponía hacerlo siguiendo las huellas del mismo Jesús, puesto que también Él ha sentido la tentación de la duda, del cansancio, del poder, de lo fácil, del
Pero Él ha superado las tentaciones. Caminar con Él es una garantía para saber cómo superar esas situaciones. El camino seguido por Él fue: – camino de disponibilidad ante el Padre; – camino de entrega y de generosidad a la causa de Dios; – camino de solidaridad para con los hombres, sus hermanos. Este segundo domingo […]