Pascua para Adolescentes
Por: P. Javier Prieto M. | Fuente: Catholic.net
Ofrezco este material que está orientado tanto para los adolescentes como para los jóvenes.
La Pascua de Adolescentes y Pascua Juvenil busca el que los muchachos tengan un profundo encuentro con Dios al tiempo que celebran con otros jóvenes los misterios centrales de nuestra fe. Los temas, catequesis, dinámicas y celebraciones tienden a ese fin.
Para ese encuentro con Dios, habrá qué ayudar a los muchachos a que le den espacio a Dios en su corazón. Para eso hay que crear un buen ambiente de apertura, de escucha, de disponibilidad. El protagonista es Dios y el primer responsable es el mismo joven.
En la dinámica de la Pascua Juvenil o de Adolescentes son los animadores, quienes están al frente de los muchachos, los que pueden crear el ambiente adecuado, quienes más pueden influir en los muchachos. Los materiales son sólo recursos que pueden favorecer. De ahí que es imprescindible conocer bien la situación de los muchachos para ver qué catequesis, temas, dinámicas, técnicas, símbolos y formas de oración y celebraciones más conviene hacer en determinado momento.
Los temas de fondo son dos, que he tratado de combinar en la medida de lo posible: por una parte los temas de las celebraciones de la Semana Santa y por otra el tema de La Familia, que está en la línea marcada por la Iglesia, particularmente, después del Encuentro Mundial de la Familia, acaecida en nuestro país en enero de este año.
El material es sólo un recurso del se puede echar mano, conscientes que se puede utilizar en parte, mejorarlo, modificarlo, o combinarlo con otros recursos que cada uno tiene a la mano. Estos recursos o materiales están divididos en 2 partes:
1. Guía para los animadores (catequesis, dinámicas, indicaciones, moniciones litúrgicas…)
2. Materiales para los jóvenes
Les deseo que en esta Semana Santa muchos muchachos lleguen a vivir una profunda experiencia del amor de Dios al estilo juvenil y signifique un cambio en la orientación de su vida, marcada por la presencia viva de Cristo vivo.
Cordialmente
P. Javier Prieto M.