El año avanza a pasos acelerados, y casi llegamos a la mitad del mismo, celebrando a un ser maravilloso: La Madre.
Cada año, parece la misma cantaleta: Día de la Madre, y entonces nos sirve para recordar a nuestras progenitoras con mucho entusiasmo, mucho jolgorio y mucha fiesta. Y recordamos a nuestras mamás con mucho cariño, y otras muchas, tal vez el único día que en buen plan las recordamos.
Y en muchos casos, tenemos la oportunidad de darle las gracias por habernos traído al mundo, y por darnos la vida. Sobre todo en un tiempo en el que las opciones por la vida cuestan tanto, nosotros podemos recordar a nuestras mamás que fueron capaces de hacer esta opción voluntariamente y también quienes involuntariamente lo han hecho pero que ahora ya nada cambia porque estamos aquí, y somos capaces de responder a la llamada que Dios nos ha hecho a la Vida.
Un mes para brindarle un reconocimiento a nuestra madre María, a quien le debemos el don maravilloso de colaborar al Plan de Dios dándonos por su opción, a Jesús.
Mejores motivos no podemos tener para recordar a nuestras mamás, a las que están con nosotros y a las que desde el cielo siguen velando por nosotros. Felicidades a todas las mamás, y les pedimos a todos nuestros lectores y lectoras que de nuestra parte, extiendan las felicitaciones a sus mamás. ¡Felicidades Mamá!
Padre Chan, cs
Fuente/Autor: Padre Chan, cs