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PARA MI SORPRESA EL NIÑO JESÚS ME CONTESTÓ

Me dio gusto leer tu carta y no te preocupes, que no desconozco ninguna de las razones que me das. Solo que te equivocas al decirme que no vuelva: ¡Ya estoy en medio de ustedes!

-Cada vez que perdonas al que te ofende, consuelas al que sufre, que escuchas, que alientas, que ayudas a tu hermano: ¡Esto es Navidad!

-Cada vez que los matrimonios y los noviazgos se tratan como José y María se trataron, con respeto, libertad, amor, comprensión, ayuda: ¡Esto es Navidad!

-Cada vez que un joven o una joven, decide dejarlo todo: familia, hogar, escuela,, carrera, trabajo, para entrar al seminario o convento y seguirme y servir a los hermanos: ¡Es Navidad!

-Cada vez que uno se hace voz de los que no la tienen, siempre en busca de la justicia y la
igualdad para sus hermanos: ¡Es Navidad!

-Cada vez que un joven decide integrarse a un grupo parroquial o a un movimiento católico y, mas que con palabras, oraciones y experiencias místicas vacías de mí, se compromete con los hechos y la vida: ¡Es Navidad!

Podría enumerarte muchas más, pero esto te toca a ti investigarlo. Pero quiero que sepas que cada día busco a quien ha preparado un pesebre en su corazón para nacer ahí.

Y no te preocupes por la solución de los problemas. Le he hecho al mundo un regalo, un regalo muy bueno: ¡TÚ!, y todos los que, como tú, buscan la construcción de un mundo, como yo lo soñé: ¡Ánimo!
– Jesús –

Fuente/Autor: Jesús