Con el agente de seguros me he interesado y he preguntado:
– ¿Cuánto valen las manos de los artistas? ¿y las manos de los médicos y de las enfermeras? ¿las manos de los atletas? ¿las manos de los escritores?….
… Ah!.. y ¿cuánto valen las manos que dan una limosna, las manos que levantan a un caído, las manos que oran, las manos que ofrecen, las manos que se elevan a Ti, Señor?
Fuente/Autor: Helder Camara