Lc 24,13-35 Aquel mismo día, dos de ellos iban camino de una aldea llamada Emaús, distante unas dos leguas de Jerusalén y conversaban de todo lo que había sucedido. Mientras conversaban y discutían, Jesús en persona se acercó y se puso a caminar con ellos, pero algo en sus ojos les impedía reconocerlo. Él les preguntó: ¿Qué conversación es esa que os traéis por el camino? Se detuvieron cariacontecidos, y uno de ellos, que se llamaba Cleofás, le replicó: ¿Eres tú el único peregrino en Jerusalén que no se ha enterado de lo ocurrido estos días en la ciudad? Él les preguntó: ¿De qué? Le contestaron: Lo de Jesús Nazareno, profeta poderoso en obras y palabras, ante […]