es que tenemos edificios más altos pero temperamentos más cortos, autopistas más anchas pero puntos de vista más estrechos. Gastamos más pero tenemos menos, compramos más pero disfrutamos menos. Tenemos casas más grandes pero familias más pequeñas, más compromisos pero menos tiempo. Tenemos más títulos pero menos sentido común, más conocimiento pero menos criterio, más expertos pero más problemas, más medicinas y menos salud. Hemos multiplicado nuestras posesiones, pero hemos reducido nuestros valores. Hablamos mucho, amamos poco, odiamos demasiado. Aprendimos a armar una vida pero no a vivirla plenamente. Hemos llegado a la luna y regresado pero tenemos problemas a la hora de cruzar la calle y conocer a nuestro vecino… Hemos conquistado el espacio exterior pero no el interior; […]