La llamada del Señor es personal, única, es un Tú a tú directo, que invita a una respuesta también personal y única de la persona a Él. El Ven y sígueme, tiene su momento concreto en la vida de cada uno, mi aquí y ahora con el Señor será distinto del de otro pero a cada uno le va a llevar a vivir desde su gracia a lo que esté llamado; es tu tiempo, tu llamada, tu experiencia, desde el Tú que ha salido a tu encuentro. En el compartir con una persona, salió esta afirmación: Te la estás jugando en lo más importante, en tu vida, vive tu experiencia, tu aquí y ahora que te pide el Señor. A […]