En estos tiempos de confusión, donde la fuerza de los medios parece no tener freno, es momento de levantar la voz ante nuestros comunicadores quienes, con el estandarte de la libertad de expresión, violan principios tan básicos como la privacía y, por obtener una nota, tergiversan el significado de los pronunciamientos y crean confrontaciones ficticias entre personajes, con el afán de que no se encarezca el material. En los últimos años se ha dado un gradual proceso de rechazo en la opinión de los medios que se convierte, lamentablemente, en pública- hacia la Iglesia. El Tribunal del Santo Oficio, el Papa Alejandro VI el Papa Borgia- y ocasionalmente las Cruzadas, han sido el arma predilecta de los apóstoles de la […]